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Taormina

Nuestro viaje por Sicilia continuó por una de las ciudades más famosas de la isla: Taormina. 

Plaza 9 de Abril, Torre del Reloj e Iglesia San José.

Como suele pasar con sitios tan renombrados, son muy turísticos y algunos prefieren evitarlos porque pueden estar demasiado invadidos o porque, lamentablemente, tanto turismo los lleva a perder su esencia. Pero resulta que Taormina siempre fue "turística", ya los griegos, romanos y bizantinos la eligieron como lugar de visita y descanso. Pero fue a fines del siglo XIX que se asentó como destino turístico de la nobleza y la clase alta de varios países europeos y comenzó a ser frecuentada por creadores y artistas como Capote, Dalí, Dumas, Wagner, Wilde y muchos otros. 

Su origen se remonta a la llegada de los griegos a la bahía de Taormina en el 753 ac quienes fundaron Naxos, la primera colonia griega de Sicilia. 

El monumento más importante de la ciudad data de esa época, el Teatro Griego, construido en el silgo III ac en un punto panorámico desde el que se puede ver el monte Etna y el mar Jónico. Fue reconstruido en el siglo II dc. 


El Teatro se encuentra al final del Corso Umberto, la calle principal de la ciudad nombrada así en homenaje a Humberto de Savoya, rey de Italia a fines del siglo XIX, un antiguo camino que unía Messina, la provincia en que se encuentra Taormina, con Catania.

Los monumentos griegos y romanos que antiguamente se encontraban sobre esta calle fueron reemplazados por las iglesias y palacios que podemos ver hoy junto con restaurantes, tiendas y comercios. 

La Plaza 9 de Abril es el "salón" más elegante de Taormina, allí se concentran bares y restaurantes y tiene un mirador hacia el mar. En la imagen de arriba está la Iglesia San José, abajo la ex Iglesia San Agustín y el Corso Umberto.

Arriba a la izquierda la Plaza del Domo y el Domo, la catedral edificada en 1400. Abajo en el centro la Puerta Catania, límite sur del Corso Umberto, construida en 1440. Abajo a la izquierda el recuerdo de mi encuentro fortuito con un amigo que también estaba de paseo por Sicilia y se dio vuelta a mirarnos cuando escuchó las voces de varias argentinas (esas cosas lindas que a veces pasan en los viajes) y a la derecha una novia que eligió, sin dudas, uno de los lugares más lindos del mundo para casarse. 


La situación de la ciudad antigua, a 200 metros sobre el mar, brinda la posibilidad de tener unas vistas increíbles desde casi cualquier lado y para aprovecharlo fuimos al Hotel Excelsior Palace, que está justo antes de la Puerta Catania, adonde disfrutamos de un increíble atardecer, con arcoíris incluido, acompañado por una picada de delicias italianas y un riquísimo prosseco. 



Pasamos en Taormina apenas un día y una noche así que no hubo tiempo para más pero si regreso a Sicilia seguro voy a volver a esta bella ciudad en la que hay mucho para explorar y también para visitar las playas y las islas que sólo pudimos ver a lo lejos. 



+ info

Transporte

Llegamos en nuestro auto alquilado con la ayuda imprescindible del GPS que en estos casos no es 100% fiable porque al salir de las rutas o autopistas los caminos se vuelven laberínticos y tuvimos que pedirle auxilio a la persona que nos alquiló el alojamiento para que nos fuera a buscar al borde del centro histórico y nos guiara hasta la casa. 


Alojamiento

A través de Booking alquilamos Casa Palumbo, una casita que estaba fuera del casco histórico, a unos 800 metros de la parte antigua en una subida que se podía hacer muy fácilmente a pie. En ese momento, mayo 2019, la casa no estaba muy linda pero era grande, económica y tenía unas vistas increíbles. 



Próxima parada: Noto y Ortigia




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