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Macao

Mi siguiente escala en el viaje fue Macao, un lugar que me resultaba interesante por ser parte de China, haber sido ocupada por los portugueses durante varios siglos y porque hoy es la Las Vegas de oriente. Por todo eso decidí pasar un par de días allí, uno en el centro histórico y otro en Taipa que es donde están los grandes hoteles. 
La península de Macao fue habitada en el inicio por pescadores llegados de las provincias de Fukien y Cantón. Los portugueses llegaron a mediados de 1500 y se establecieron en este punto clave para el comercio de la región, por aquí circulaba mercadería entre China, Japón, India y Europa y formaba parte de la ruta de la seda. También por esta razón fue elegida para la difusión de la fe cristiana, de hecho en Macao hay muchas iglesias lo que es muy poco habitual en Asia donde predominan ampliamente otras religiones como el budismo. 
Durante la guerra del opio, 1841, tras la victoria inglesa surgió Hong Kong y Macao perdió protagonismo y aunque Hong Kong se convirtió en unos de los principales centros del comercio mundial, Macao mantuvo su atractivo como lugar de esparcimiento y turismo. Luego creció con ciertas industrias principalmente la del entretenimiento y los resorts de lujo. Los primeros casinos se instalaron en los años 60 y se convirtieron rápidamente en una gran atracción. Luego, con el surgimiento de Taipa en los 90, la ciudad se desarrolló en este rubro y es importante señalar que Macao es el único lugar de China donde es legal el juego. 
Lo increíble es que China recuperó la administración de Macao de Portugal recién en el año 2000. 
Hoy Macao es una Región Administrativa Especial de la República Popular China y mantiene un régimen que se conoce como "un país, dos sistemas". Tiene su propio sistema legal, seguridad pública, sistema monetario y políticas aduanera y de administración, pero China es, por ejemplo, responsable de la defensa y la política exterior. En los hechos al alcance del turismo es evidente que existen más "libertades" que en China central, por ejemplo allí no hay bloqueos para sitios de internet y aplicaciones.
Está ubicada frente a Hong Kong a un corto vuelo de distancia o un viaje en ferry de dos horas y media. 
Para ser sincera no me gustó demasiado. El centro histórico tiene algunos sectores lindos, aquellos donde ser conservan en mejor estado las edificaciones portuguesas, pero el resto está bastante descuidado y eso lo desluce mucho, además hay un caos que, en este caso, no me resultó muy atractivo. En defensa de la ciudad debo decir que llegué después a la tarde y pude recorrer un poco antes de que anocheciera y cerraran los locales, cierran temprano como en muchas partes, además al día siguiente me fui a eso de las 13 a Taipa así que no tuve demasiado tiempo para pasear. 
Taipa es una gran imitación de Las Vegas y vale la pena visitarla sólo si les gustan los casinos (a mí no me interesan) o si quieren/pueden disfrutar de los hoteles. Yo conseguí una oferta bastante buena en el Venetian (el dolar estaba mucho más barato y no había impuesto) y me desquité de lo poco que pude aprovechar mi estadía en la verdadera Las Vegas. 
En fin... siempre es bueno conocer lugares nuevos. 

Península de Macao
Aquí está el centro histórico y las principales atracciones que dan cuenta de la relación entre la cultura portuguesa y la china, que además fueron declaradas Patrimonio Mundial por UNESCO. Recorriendo las típicas veredas de piedritas que podemos encontrar tanto el Portugal como en Brasil veremos la Plaza del Senado, la Iglesia Santo Domingo y las ruinas de la Catedral San Pablo y podríamos pensar que estamos en Lisboa u Olinda por ej., las pequeñas colinas y los pasteles de nata que están por todos lados ayudan a mantener la ilusión. 
Yo adoro Brasil, adonde fui varias veces, y me encantó Portugal así que esta impronta me resultó tan atractiva como familiar aunque es muy raro ver ese escenario poblado de gente con ojos rasgados hablando un idioma totalmente incomprensible para nosotros. 
Plaza del Senado
La Iglesia San Pablo fue una de las más grandes de la ciudad pero quedó destruida luego de un incendio en 1835, cuando era usada como cuartel militar, y sólo se conservó la fachada que se sigue imponiendo en lo alto de una gran escalinata. 
Fortaleza del Monte. Data del siglo XVII y fue fundamental en la defensa de Macao contra la invasión holandesa en ese mismo siglo. Es una fortificación clásica con un muero perimetral de piedra y por su ubicación en lo alto de una colina brinda unas vistas lindísimas del centro histórico de la ciudad. 
Un poco más del centro histórico. Arriba a la izquierda la Iglesia Santo Domingo

Cuando visité el Teatro D. Pedro V tuve la suerte de asistir al ensayo de un trío de cuerdas, fue un momento muy lindo. 
En mi recorrida no visité museos pero sí fui a la casa de Lou Kau, construida a fines del siglo XIX por ese mercader. Me llamó la atención la simplicidad del exterior, muy similar a la modernidad que llegaría varias décadas después, y su interior tradicional con esas piezas de madera talladas tan propias de la cultura china que me encantan. 

El centro histórico también tiene sus sectores trendy como el Patrio de Chon Sau ubicado muy cerca de las ruinas de San Pablo. 


En la península de Macao están los primeros casinos y varios de ellos, como los de Las Vegas, hoy se ven muy pasados de moda. El Grand Lisboa es el más llamativo de este sector (y probablemente el más feo) pero también están allí el Wynn, el MGM y el Sands. 



Taipa
Confieso que me sorprendí mucho al saber que la zona de resorts y casinos de la isla de Taipa surgió por iniciativa de Sheldon Adelson, propietario del Venetian y otros hoteles de Las Vegas, quien a principios de los 2000 se asoció con el gobierno de Macao para desarrollar lo que menos de 20 años después, se convertiría en el mayor centro de entretenimientos del mundo, superando a la mismísima Las Vegas. 
Hoy en esta zona están no sólo el Venetian sino también el Parisian, Wynn y las versiones más modernas del Sheraton, MGM, Sands, Grand Lisboa, Four Seasons, Marriot y muchos más. 
Como Las Vegas, se recorre a través de los hoteles que son lo más interesante porque así como LV era un desierto, Taipa era una zona recuperada al mar llena de pantanos. 
Aunque no me gusta apostar ni tampoco el ambiente de los casinos, me había gustado LV y me quedé con gusto a poco, apenas estuve 2 días, así que esta me pareció la oportunidad ideal. Además, por supuesto, del bonnus de pasar una noche en un gran hotel.
El viaje desde la península es de una media hora y se puede ir en los buses provistos por los mismos hoteles que salen de varios puntos de la península, yo lo tomé en el embarcadero. 
Había calculado el tiempo para llegar al Venetian en el horario del check inn para poder disfrutar mi estadía a pleno. Vale la pena contar que mi amiga y gran compañera de viaje Marisu me enseñó a entrar a los grandes hoteles aún sabiendo que están muy por fuera de mi presupuesto, porque muchas veces es posible recorrerlos y a veces hasta tomar un café o un trago a precios razonables. También me enseñó a mirar las tarifas por si acaso y así fue que encontré una oferta en el Venetian a un precio muy bueno para lo que es el hotel, con late check out, internet super rápida y un almuerzo buffet o pasaje de ferry incluidos. Me costó 200 dólares que no era barato, por supuesto, pero era muy razonable para lo que cotizaba el dólar en ese momento en Argentina y si hubiera viajado acompañada, la habitación era para dos, habría sido mejor aún. Yo había sacado el pasaje de ferry a Hong Kong con anticipación porque no sabía cuál era la demanda así que de los dos extras elegí el buffet, ya les contaré. 
Habitualmente comento los alojamientos en los que estuve al final de cada entrada pero esta vez me meto directamente en eso porque quedarme en este hotel fue una de las principales razones para visitar Macao. 
Exteriormente es igual al de Las Vegas y el interior también, sólo varían los empleados y huéspedes (la mayoría orientales pero también muchos indios) y abundan los restaurantes asiáticos. 
La habitación era enorme, 60 m2, con un baño gigantesco y muy elegante, cama extra grande y super cómoda y un área de estar. 
Lo malo de estar poco tiempo en este tipo de hoteles es que no alcanza para disfrutarlos a full pero sí aproveché la piscina que era buenísima, de hecho eran tres pisicinas, una con agua tibia que es la que elegí y otra para niños, más un jacuzzi. Además no había nadie (estaban todos jugando, obviamente) así que eran sólo para mí. 
Después de pasar toda la tarde ahí me fui a recorrer el hotel que es gigantesco. El interior imita los canales de Venecia, con gondoleros y todo, y es un gran centro comercial con todo tipo de tiendas y restaurantes. Todos sabemos que es una escenografía pero está muy bien lograda. 
Los enormes pasillos conducen hasta el Parisian que forma parte del mismo complejo. 
Al día siguiente desayuné en la habitación, la tarifa no incluía desayuno pero había pava eléctrica y yo tenía café instantáneo que acompañé con un muffin de Starbuks, y me fui a la piscina casi hasta la hora del chek out que fue a las 14 hs. Luego de dejar la habitación fui a almorzar al buffet y en aprovechar la comida no fallo nunca. Mi método, después del desastre de Las Vegas, es ir con tiempo para poder probar todo (poquito) lo que quiero con tranquilidad. Valió la pena, estuvo muy bueno, todo menos el sushi que no me encantó. 
Esa fue mi despedida de Macao, después del almuerzo fui en el bus del hotel hasta el embarcadero para tomar el ferry a Hong Kong, última etapa de mi viaje por China. 


+ info

Visa
Los argentinos necesitamos visa para ingresar a Macao, yo no lo sabía pero por suerte pude sacarla en el embarcadero, casi que el único requisito era pagar. 

Moneda
Macao tiene su propia moneda, la pataca macanesa, pero aceptan también el dólar de Hong Kong así que opté por ésta última que me sería útil después. A diferencia de en China es muy fácil conseguir casas de cambio. 

Transporte
Tomé un vuelo de Shanghai a Hong Kong y en el mismo aeropuerto conecté con el ferry a Macao, Cotai Water Jet. Ese pase está muy bien organizado y es muy simple. El viaje en ferry es de 2.30 hs. 
Dentro de Macao tomé un bus desde el puerto hasta la zona de mi hotel y luego me manejé con los buses del Venetian que son gratuitos. El centro histórico lo recorrí caminando sin problemas. 

Alojamiento
En la península me alojé en el Ole Tai Sam Un Hotel, bien ubicado para recorrer la zona histórica, cómodo e impecable. No tenía desayuno pero sí pava eléctrica y té de obsequio. 
La habitación, la zona y la vista. 


Próxima parada: Hong Kong. 


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