A fines de 2016 partimos hacia un nuevo país, Australia, y un nuevo continente, Oceanía, para vivir una de esas experiencias con la que muchos viajeros soñamos: fin de año en Sydney.
Pero nuestra primera parada fue Melbourne una ciudad que combina muy buena arquitectura, antigua y moderna, mucha vida en las calles, buen clima, sitios naturales impresionantes a sólo unos minutos y que para colmo es, según dicen, uno de los mejores lugares del mundo para vivir.
Nuestros escasos dos días en la ciudad no nos permitieron verificar eso pero sí descubrir que la ciudad es muy hermosa y quedarnos con ganas de más.
Mis amigas llegaron un día antes que yo y aprovecharon el día de mi llegada para ir al Gran Camino Oceánico y los 12 Apóstoles, así que cuando llegué al mediodía me fui hasta el hostel, dejé las valijas y salí a recorrer la ciudad con un tour gratuito de Melbourne Free Walking Tours, algo muy recomendable cuando se visita una ciudad por primera vez. Este tipo de tours me resultan más originales que los típicos de agencia, generalmente son guiados por jóvenes, el público también lo es mayormente, y además de recorrer los lugares típicos se visitan otros menos frecuentados y se conocen datos copados, además el pago es a voluntad.
En esta visita recorrimos la zona céntrica, le dicen CBD, que se puede hacer caminando perfectamente, y también en los tranvías que son gratuitos en la zona central. Empezamos frente a la Biblioteca, caminamos hasta Carlton Gardens donde está el Royal Exhibition Building, el Parlamento, el barrio de los teatros que está enfrente, luego el Barrio Chino, y los famosos callejones intervenidos con graffitis: Union Lane y Hosier Lane, imperdibles. Seguimos a Federation Square una plaza y complejo de edificios culturales, comerciales y de entretenimiento cuya arquitectura no me gustó pero es uno de los centros de la ciudad y está sobre el río Yarra que la atraviesa. Los puentes sobre el río permiten apreciar el atractivo skyline de Melbourne. Terminamos la visita en el Arts Center Melbourne.
Después de la visita caminé un poco por la ribera y fui hasta la estación de ferrocarril pero el calor era insoportable y estaba muy cansada así que volví al hostel adonde me encontré con mis amigas. El día terminó temprano para nosotras porque ellas volvían cansada de la excursión y al día siguiente me tocaba a mí.
La Gran Carretera Oceánica es uno de los recorridos más hermosos del país y la frutilla del postre es la formación natural conocida como 12 Apóstoles, una verdadera maravilla. El tour que tomé nos llevó por pueblos pintorescos y otros sitios naturales como el Memorial Arch, London Bridge, Rainforest y obviamente los 12 Apóstoles para terminar el día en una lindísima playa.
Así terminó mi breve visita a Melbourne, al días siguiente partimos para Sydney. Nos quedaron muchas cosas para ver y sobre todo tiempo para visitar esta hermosa ciudad que por lo que pude ver, vale la pena para unos días más.
+ info
Alojamiento
Space Hotel. Muy bueno. Está justo al borde de la zona céntrica, con acceso caminando y en tranvía a todas las atracciones. Tiene distintos tipos de habitaciones, privadas y compartidas, no incluye desayuno pero hay una buena cocina y sectores comunes y una terraza genial para descansar con buena vista.
Transporte
Desde el aeropuerto tomé el Sky Bus hasta el centro y desde allí un tranvía hasta el hostel.
Todo el centro se puede recorrer caminando pero como conté en esa zona los tranvías son gratuitos así que si hace mucho calor, como cuando yo fui, no vale la pena agotarse.

Bonus track
Conseguir buenas tarifas para viajar a fines de diciembre, comprando el pasaje apenas 4 meses antes, es casi imposible pero me las arreglé para encontrar un precio razonable dadas las circunstancias con la contra de la cantidad de escalas: Buenos Aires - Dubai - Singapur - Melbourne.
Un viaje de casi 2 días que pareció eterno pero que me permitió el pequeño placer de hacer un city tour gratuito por Singapur, gentileza del aeropuerto Changi. El dato me lo pasó mi compañero de viaje a Dubai que ya había estado varias veces en la ciudad. Hay varios tours diarios y están disponibles para todos los viajeros que tengan más de 6 horas de escala. Hay que acercarse hasta un mostrador en la terminal 2 para registrarse, desde allí el guía acompaña al grupo por migraciones y luego en una visita de 2,30 hs por los sitios más representativos de esta increíble ciudad en la que me quedé al regreso, pero eso vendrá después.
El aeropuerto Changi además es uno de los mejores del mundo, además de cientos de negocios y restaurantes, tiene masajeadores de piernas gratuitos, un mariposario, un botánico, un área para películas, y hasta una piscina. Las escalas allí pueden ser muy entretenidas.
Mi consejo para estos viajes demoledores es tener una tarjeta de acceso a salones VIP y Lounges, muchas tienen al menos un par de visitas sin costo por año pero aunque haya que pagar vale la pena, son alrededor de 30 dólares, porque son salones muy lindos y cómodos, con buena comida y bebidas y hasta con duchas. Y les aseguro que darse un baño en el medio de 40 horas de vuelo hace toda la diferencia.
Pero nuestra primera parada fue Melbourne una ciudad que combina muy buena arquitectura, antigua y moderna, mucha vida en las calles, buen clima, sitios naturales impresionantes a sólo unos minutos y que para colmo es, según dicen, uno de los mejores lugares del mundo para vivir.
Nuestros escasos dos días en la ciudad no nos permitieron verificar eso pero sí descubrir que la ciudad es muy hermosa y quedarnos con ganas de más.
Mis amigas llegaron un día antes que yo y aprovecharon el día de mi llegada para ir al Gran Camino Oceánico y los 12 Apóstoles, así que cuando llegué al mediodía me fui hasta el hostel, dejé las valijas y salí a recorrer la ciudad con un tour gratuito de Melbourne Free Walking Tours, algo muy recomendable cuando se visita una ciudad por primera vez. Este tipo de tours me resultan más originales que los típicos de agencia, generalmente son guiados por jóvenes, el público también lo es mayormente, y además de recorrer los lugares típicos se visitan otros menos frecuentados y se conocen datos copados, además el pago es a voluntad.
En esta visita recorrimos la zona céntrica, le dicen CBD, que se puede hacer caminando perfectamente, y también en los tranvías que son gratuitos en la zona central. Empezamos frente a la Biblioteca, caminamos hasta Carlton Gardens donde está el Royal Exhibition Building, el Parlamento, el barrio de los teatros que está enfrente, luego el Barrio Chino, y los famosos callejones intervenidos con graffitis: Union Lane y Hosier Lane, imperdibles. Seguimos a Federation Square una plaza y complejo de edificios culturales, comerciales y de entretenimiento cuya arquitectura no me gustó pero es uno de los centros de la ciudad y está sobre el río Yarra que la atraviesa. Los puentes sobre el río permiten apreciar el atractivo skyline de Melbourne. Terminamos la visita en el Arts Center Melbourne.
Después de la visita caminé un poco por la ribera y fui hasta la estación de ferrocarril pero el calor era insoportable y estaba muy cansada así que volví al hostel adonde me encontré con mis amigas. El día terminó temprano para nosotras porque ellas volvían cansada de la excursión y al día siguiente me tocaba a mí.
La Gran Carretera Oceánica es uno de los recorridos más hermosos del país y la frutilla del postre es la formación natural conocida como 12 Apóstoles, una verdadera maravilla. El tour que tomé nos llevó por pueblos pintorescos y otros sitios naturales como el Memorial Arch, London Bridge, Rainforest y obviamente los 12 Apóstoles para terminar el día en una lindísima playa.
Así terminó mi breve visita a Melbourne, al días siguiente partimos para Sydney. Nos quedaron muchas cosas para ver y sobre todo tiempo para visitar esta hermosa ciudad que por lo que pude ver, vale la pena para unos días más.
+ info
Alojamiento
Space Hotel. Muy bueno. Está justo al borde de la zona céntrica, con acceso caminando y en tranvía a todas las atracciones. Tiene distintos tipos de habitaciones, privadas y compartidas, no incluye desayuno pero hay una buena cocina y sectores comunes y una terraza genial para descansar con buena vista.
Transporte
Desde el aeropuerto tomé el Sky Bus hasta el centro y desde allí un tranvía hasta el hostel.
Todo el centro se puede recorrer caminando pero como conté en esa zona los tranvías son gratuitos así que si hace mucho calor, como cuando yo fui, no vale la pena agotarse.

Bonus track
Conseguir buenas tarifas para viajar a fines de diciembre, comprando el pasaje apenas 4 meses antes, es casi imposible pero me las arreglé para encontrar un precio razonable dadas las circunstancias con la contra de la cantidad de escalas: Buenos Aires - Dubai - Singapur - Melbourne.
Un viaje de casi 2 días que pareció eterno pero que me permitió el pequeño placer de hacer un city tour gratuito por Singapur, gentileza del aeropuerto Changi. El dato me lo pasó mi compañero de viaje a Dubai que ya había estado varias veces en la ciudad. Hay varios tours diarios y están disponibles para todos los viajeros que tengan más de 6 horas de escala. Hay que acercarse hasta un mostrador en la terminal 2 para registrarse, desde allí el guía acompaña al grupo por migraciones y luego en una visita de 2,30 hs por los sitios más representativos de esta increíble ciudad en la que me quedé al regreso, pero eso vendrá después.
El aeropuerto Changi además es uno de los mejores del mundo, además de cientos de negocios y restaurantes, tiene masajeadores de piernas gratuitos, un mariposario, un botánico, un área para películas, y hasta una piscina. Las escalas allí pueden ser muy entretenidas.
Mi consejo para estos viajes demoledores es tener una tarjeta de acceso a salones VIP y Lounges, muchas tienen al menos un par de visitas sin costo por año pero aunque haya que pagar vale la pena, son alrededor de 30 dólares, porque son salones muy lindos y cómodos, con buena comida y bebidas y hasta con duchas. Y les aseguro que darse un baño en el medio de 40 horas de vuelo hace toda la diferencia.
Próxima parada: Sydney
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